Compartimos las expresiones de la Sra. Embajadora de Filipinas en Argentina S E Linglingay Lacanlale. Esta entrevista ofrece un completo abordaje de los temas de política exterior de Filipinas, con comentarios sobre asuntos de geopolítica como la perspectiva de Manila sobre el desarrollo del proyecto de la Nueva Ruta de la Seda, el diferendo sobre las islas Spratly-Paracells y la agenda de ASEAN. La diplomática de carrera Linglingay Lacanlale, que fuera también funcionaria de Filipinas ante las Naciones Unidas, nos brinda información sobre el curso de las relaciones bilaterales entre su país y la República Argentina, sobre cómo están las cosas entre el bloque del Sudeste Asiático ASEAN y el Mercosur. Y Filipinas, país como vínculo especial con Argentina y América Latina, abre muchas oportunidades para nuestra región, y para ello tenemos que conocer y acercarnos a su cultura, su historia y también, a su realidad.
Pregunta: deseamos saber, en primer término, acerca de su misión en nuestro país, sus competencias y objetivos. Del mismo modo, nos gustarían sus comentarios acerca de la política exterior que lleva a cabo Filipinas.
Embajadora Linglingay Lacanlale: primeramente, quisiera mencionar los tres pilares de la política exterior filipina, que son las principales directivas que tenemos para nuestra misión. En primer lugar, la protección de nuestros ciudadanos que residen en el extranjero, que totalizan más de diez millones de personas alrededor del mundo; en segundo lugar está la diplomacia económica: somos una nación que tiene sus puertas abiertas para las inversiones, el comercio, el turismo, la ciencia y la tecnología. Debemos contribuir al progreso económico de nuestro país. El tercer pilar de nuestra política exterior es la protección de nuestra seguridad nacional. Nuestro presidente Rodrigo Duterte, desde el mismo inicio de su mandato, ha dejado en claro que, además de estos tres pilares fundamentales de nuestra política exterior, está la intención de nuestro país de ser amigo de todos. En el pasado, hemos estado alineados principalmente con los Estados Unidos: eran nuestro principal asociado. Nuestro Presidente inició su mandato con un llamado a una política exterior independiente, lo cual está consagrado en nuestra Constitución. Sin embargo, en la práctica, los grados de relacionamiento con nuestros amigos son diferentes; puesto que varían según nuestros intereses nacionales, teniendo siempre al pragmatismo como guía. Mantenemos excelentes relaciones con los Estados Unidos, pero queremos tener un vínculo más sólido con China.
China es un país enorme, es nuestro vecino y tenemos una larga historia de relaciones mutuas, y actualmente estamos buscando lograr mayor cooperación en áreas mutuamente beneficiosas.
Pregunta: ya que estamos hablando de China, queríamos preguntarle sobre la posición de su país respecto a la iniciativa “One Belt One Road” ¿Cree Filipinas que esta iniciativa pueda perjudicarla o beneficiarla, particularmente respecto a las rutas marítimas que pasan cerca de su país? ¿Qué puede usted comentarnos al respecto?
Embajadora Linglingay Lacanlale: De acuerdo con nuestros intereses nacionales, nos mantenemos muy atentos a la iniciativa “One Belt One Road”, hemos participado en sus reuniones. Filipinas está abierta a toda asociación o participación que sea mutuamente beneficiosa, o beneficiosa para nosotros. En este sentido, mantenemos las puertas abiertas. Los demás miembros de ASEAN miran con atención a dicha iniciativa. Hago esta mención porque consideramos que el liderazgo y la centralidad de ASEAN son los principios más importantes que nos guían. En el marco de ASEAN, tenemos la iniciativa ASEAN Regional Economic Cooperation Partnership (RCEP). Esta iniciativa apunta a armonizar todos los tratados y compromisos adquiridos por sus miembros del mismo modo que el resto de las naciones que componen ASEAN. Es un hecho esperanzador la firma, por parte de las seis partes en diálogo, de la iniciativa RCEP. Con ella seremos capaces de incrementar nuestro comercio y nuestros estándares económicos. ASEAN se convertirá en una importante fuerza económica, tanto en el plano regional como el global. En resumen, estamos abiertos a la asociación y la cooperación con otros estados por los beneficios mutuos que ello implica.
Pregunta: ¿Cómo podría describirse, más específicamente, el rol de Filipinas en ASEAN? Desde nuestro espacio observamos permanentemente a ASEAN y su dinámica de relacionamiento, nos interesa mucho y creemos que es un excelente espejo para el MERCOSUR. ¿Puede compartir sus comentarios sobre la relación de ASEAN con Argentina y el MERCOSUR?
Embajadora Linglingay Lacanlale: Filipinas es un miembro fundador de ASEAN, e incluso anteriormente a la formación del mismo ya éramos miembros de MAPHILINDO (Malasia, Filipinas e Indonesia), y previo a ello fuimos miembros de SEATO (South-East Asia Treaty Organization). Nuestra participación en estas organizaciones, y actualmente en ASEAN, demuestran la importancia que le damos a la agrupación regional para el cumplimiento de nuestros objetivos de desarrollo nacionales, y por ello acompañamos desde el principio la iniciativa de formar ASEAN. ASEAN ha evolucionado, y hoy es una organización fuerte cuyo objetivo es primeramente mantener la paz en la región. Filipinas, dentro de ASEAN, además de ser un miembro fundador, es un muy activo socio de esta organización. Recientemente tuvimos la presidencia de la organización durante 2017 con el lema “Asociándonos por el cambio, Comprometiéndonos con el Mundo”. Filipinas fue la sede de la cumbre de los Jefes de Estado de ASEAN durante su 50° aniversario, promulgamos una gran cantidad de iniciativas. Entre ellas impulsamos la creación del Código de Conducta para la negociación con China respecto del Mar del sur de China, y durante nuestra presidencia se adoptaron, mediante los Jefes de Estado de los países miembros, varios documento, como la declaración para el combate y prevención del delito cibernético, la declaración sobre la innovación, la Agenda de acción en ordenar el empoderamiento económico de las mujeres en ASEAN, la declaración sobre la resistencia anti-microbiana, como combatirla y el enfoque de salud, entre otros. También ASEAN es una entidad donde se discuten muchos temas importantes, como la discusión del conflicto del Mar Meridional de China. La reunión de ASEAN que se está llevando a cabo en Singapur tiene entre sus asuntos a tratar la cuestión del conflicto en el Mar Meridional de la China y las islas Spratly-Paracells. Por todo ello, la participación en todas las iniciativas y actividades de ASEAN –socio-culturales, económicas, políticas – es central para nosotros.
El MERCOSUR y ASEAN tienen objetivos similares, tendiendo al desarrollo económico, social, cultural y humano de sus países miembros. ASEAN sigue pasos muy cuidadosos en su proceso de toma de decisiones con diversas instancias a cumplir. Por ejemplo, Argentina en el año 2017 dio el primer paso firmando el Tratado de Amistad y Cooperación en el Sudeste Asiático, pero para lograr ello debió dar estos pasos como muestra concreta y genuina de su interés por participar de nuestras iniciativas y cooperar con nosotros. Esperamos con ánimos que se traduzca la firma de este tratado con Argentina en actividades concretas con ASEAN. Tenemos diversos foros dentro de ASEAN: el Foro Regional de ASEAN, programas culturales, actividades, iniciativas de cooperación, etc, y en todos ellos podría participar Argentina. El Presidente Macri habla de la “inserción inteligente”. ¿Pero cómo se podría implementar esta inserción inteligente? ASEAN es un grandísimo mercado: 640 millones de personas, casi el 10% de la humanidad. Es un espacio muy propicio para que terceras partes se involucren positivamente en él y aprovechen esta gran oportunidad.
Argentina debe seguir este camino, mostrando este genuino interés en ASEAN, y participando en sus programas y actividades. Lo mismo aplica para MERCOSUR. Si bien desde MERCOSUR se manifiesta mucho interés en ASEAN, y la cuestión fue tratada en las reuniones de Embajadores de ASEAN en Yakarta, aún no hemos avanzado mucho. Creemos que el MERCOSUR aún debe mostrar este interés genuino del que hablaba previamente, y puede también trabajar en los foros de ASEAN que mencioné, participando así de programas y proyectos con ASEAN.
Pregunta: permítanos continuar con el asunto de las islas Spratly-Paracells. Es un asunto al que le prestamos atención en la Argentina, pues tenemos un conflicto similar por la soberanía de las Islas Malvinas. Más allá del esfuerzo conjunto que realiza ASEAN para la resolución del conflicto ¿Lleva Filipinas negociaciones bilaterales con China sobre este conflicto, o el estado de situación del mismo es status quo?
Embajadora Linglingay Lacanlale: en primer lugar, debo comenzar explicando que el conflicto se debe a una declaración de China, llamada “la línea de los nueve puntos”, en la cual declara unilateralmente la soberanía china sobre una gran área que incluye gran parte de nuestra zona económica exclusiva. La República de Filipinas acudió al Tribunal de La Haya para que confirme nuestros derechos en nuestra Zona Económica Exclusiva, y el Tribunal falló a nuestro favor, consagrando nuestros derechos sobre la zona disputada. China eligió no participar del proceso en el Tribunal Internacional, y no concurrió a las audiencias. China no reconoce la sentencia favorable que nos otorgó el Tribunal, manifestando que este no tenía competencia para entender sobre el asunto, pero este fallo ya está perfectamente reconocido por el Derecho Internacional. Este tribunal es una excelente vía a la que todos los países pueden recurrir. Esto podría ser muy útil para la Argentina, no solo la vía en sí, sino el fallo que obtuvimos – es jurisprudencia internacional utilizable.
Pero la pregunta es ¿Cómo lo llevamos a la práctica? China persiste en el desconocimiento del fallo del Tribunal. El enfoque de nuestro actual gobierno es encontrar un entendimiento pacífico y pragmático: no podemos ir a la guerra con China. Estamos dispuestos a hablar sobre cuál es la mejor vía para arribar a una solución, teniendo en cuenta siempre nuestros legítimos derechos sobre el área – consagrados por el Tribunal de la Haya. Esta política se basa firmemente en el apego al Derecho Internacional y sus normas, fundamentalmente la Convención Internacional del Derecho del Mar, de la que China es parte.
En estos días se ha dado a conocer que China construyó puestos de observación en las islas disputadas, y hay sospechas de que se trate de una militarización de la zona. De ser cierto, definitivamente tomaremos acciones al respecto. China ha declarado que son instalaciones de uso pacífico: principalmente para meteorología, pero también alega que estas acciones se llevan a cabo en prosecución de su interés nacional. En resumen, podemos decir que tratamos de solucionar este tema sin confrontar, del modo más pacífico y constructivo posible, mientras buscamos reforzar nuestras relaciones en otras áreas de cooperación.
Los sucesos en el Mar Meridional de la China pueden ser lo que llamamos un “flashpoint”, y somos conscientes de que pueden desatar un conflicto a escala muy grande. La competencia entre Estados Unidos y China es muy grande, y este es uno de los lugares en donde se manifiesta. Ello afecta al comercio marítimo sobremanera, esta ruta marítima es muy importante para todos los grandes actores: China, Japón y Estados Unidos. Gran parte del comercio mundial transita por estas aguas, en particular el estadounidense. Esto transforma a la posición de Filipinas en una posición estratégica, ya que el Mar Filipino es parte del reclamo chino. Y las ramificaciones militares del asunto hacen que termine afectando directamente la estabilidad de la región. El interés de ASEAN es tener mantener la paz, la estabilidad, mantener la libre navegación y no distraer o afectar el entorno de desarrollo que está teniendo la región.
Pregunta: Hacia otro punto de la entrevista, queremos conversar sobre oportunidades comerciales y de negocios para Latinoamérica y Filipinas, y también sobre turismo. ¿Qué comentarios puede hacernos sobre estos puntos?
Embajadora Linglingay Lacanlale: Argentina es un país muy grande, y hay dos factores que tiene que tener en cuenta para captar el turismo, no sólo de Filipinas, sino también del Sudeste Asiático. El primero es la necesidad de facilitar el arribo de turistas a Argentina, lo cual aplica también para la región – esto mejoraría el nivel de comercio e incrementaría el turismo. Una manera sería flexibilizar y agilizarla normativa respecto de la obtención de visas de turismo. Estas facilidades ayudarían a que empresarios interesados en venir y conocer su país, puedan arribar sin encontrarse frente a complejos trámites. Estamos agradecidos, en este punto, de que recientemente Argentina incluyó a Filipinas en la lista de visas electrónicas, lo que facilita su obtención. Nosotros los filipinos permitimos que los argentinos nos visiten hasta 30 días en calidad de turista, sin necesidad de obtener una visa, incluso en algunos casos se puede eximir del procedimiento a viajeros de negocios si se trata de viajes cortos. Esperamos que en el futuro esta cortesía se extienda de manera recíproca a Filipinas, mejorando nuestro clima de negocios. El segundo factor a considerar, es que debemos trabajar para que nuestros pueblos se conozcan mutuamente, aumentando la información existente y promoviendo mayor interacción. Si bien Argentina es un lugar lejano a mi país, la realidad es que existe interés en conocerla.
Pregunta: en Noviembre pasado, se ha celebrado en la Cancillería de Argentina el 70° aniversario de las relaciones bilaterales entre ambos países. ¿Cuál el estado de las relaciones bilaterales al momento? ¿Puede comentarnos sobre algunas iniciativas argentinas que se lleven a cabo en Filipinas?
Embajadora Linglingay Lacanlale: al día de hoy, las relaciones bilaterales entre Filipinas y Argentina son cercanas y amigables. Compartimos un pasado español común, y tenemos valores compartidos entre nuestras sociedades, lo que ha fomentado un crecimiento en agricultura, agroindustria, comercio, inversión, educación y servicios. En los últimos tiempos ha habido visitas de alto nivel realizadas por ministros. El año pasado nos visitó el Ministro de Agroindustria, para discutir algunas cuestiones relacionadas con su cartera. Deseamos que la Argentina nos asesore en temas como siembra y cosecha de granos gruesos, y a nuestros granjeros en sistemas de comercialización directa, del tipo “de la granja al mercado”, y a prevenir perdidas en las cosechas. Argentina tiene una vasta experiencia en estas materias y deseamos nutrirnos de esos conocimientos. Principalmente en la reducción de pérdidas en la cosecha y el desperdicio de alimentos, que son graves problemas para nosotros. También tenemos interés en infraestructura. Puedo mencionar el interés de uno de los principales desarrolladores inmobiliarios filipinos de venir a adquirir casas prefabricadas en Argentina, y elementos pre moldeados para construcciones mayores Respecto de iniciativas argentinas realizadas en Filipinas, puedo mencionar la empresa argentina FARMESA, que trabaja en aditivos de comida. Está en el proceso de establecer una planta de procesamiento de algas marinas por 60 millones de dólares en Filipinas, la cual utilizarán primariamente para exportar. Otra iniciativa se halla en el aspecto culinario. Debo decir que me sentí gratamente sorprendida cuando el dueño del restaurant “La Cabrera” me comentó hace un mes que abriría un segundo restaurante en Manila, de la misma marca. Yo lo había visitado en el mes de junio y no me había hecho comentarios al respecto. Esto refleja el gran gusto que tenemos en Filipinas por la carne vacuna, y puntualmente por la carne argentina. Si bien es algo cara, el importante ascenso social de la clase media, con muchos jóvenes trabajando en compañías de medicina prepaga, alta tecnología y call-centers generó un buen mercado para el producto. Estos jóvenes tienen buena predisposición a gastar, y tienen una visión cosmopolita del mundo. Durante mi juventud, no solíamos viajar porque nos era costoso, y porque nos faltaba información acerca de buena parte del mundo. El destino tradicional para turismo y educación en Filipinas era los Estados Unidos. Pero ahora, los turistas filipinos exploran nuevos destinos tales como Sudáfrica, por ejemplo. Allí hay un buen mercado que la Argentina podría explotar. Una potencial área de cooperación sería el programa de infraestructura del gobierno filipino, por 200 billones de dólares por los próximos diez años. Invitamos a Argentina a participar en este ambicioso programa. Para nombrar una iniciativa filipina en Argentina, puedo mencionar el puerto de contenedores internacional de la Plata, que ha recibido importantes inversiones de mi país.
Pregunta: en objetivos de aprender más de la diplomacia, cuando Filipinas decidió establecer relaciones diplomáticas con Latinoamérica, comenzó estableciendo una legación en la Argentina. Hemos visto una película que se proyectó en el Ministerio de Relaciones Exteriores de nuestro país contando esta historia. ¿Puede mencionarnos algo al respecto?
Embajadora Linglingay Lacanlale: esto sucedió en 1948, año del cual data la filmación. Nuestra representación no era una Embajada plena en ese entonces, sino como usted dijo, era una legación a cargo de un Ministro Plenipotenciario, que es el protagonista de la película. Esto marca el inicio de nuestras relaciones formales con Argentina. Algunos años después, se instaló el primer Embajador filipino en Argentina. Pero mucho antes de esto, en el temprano siglo XIX, recibimos la visita de uno de los primeros circunnavegadores del mundo: Hipólito Bouchard, marino argentino con patente de corso. El amarró en Manila, con la intención –según numerosos historiadores- de animar a los filipinos a rebelarse contra la dominación española. Ese es el primer contacto entre Filipinas y Argentina. En el Museo de la Casa Rosada de Buenos Aires existe una estatua del General San Martín esculpida y donada por un escultor filipino. En los últimos años del siglo XIX, residían en España descendientes de familias filipinas ricas, y se los conocía como “Los Ilustrados”. Por ese entonces la República Argentina era considerada un país muy liberal y era objeto de la admiración de estos jóvenes, muchos de ellos eran artistas. Y visitaron Buenos Aires y luego terminaron estableciéndose aquí, y sus descendientes aún viven en Argentina. Hay un caso muy curioso de un conjunto de jazz de origen filipino, que migró desde Boston a la Argentina. Observaron un barco en el puerto que se dirigía aquí y se preguntaron “¿Por qué no?” y emigraron. Compartimos también con Argentina una afinidad cultural y valores heredados de España Pregunta: aprovechamos entonces para preguntarle ¿cómo están actualmente las relaciones bilaterales entre Filipinas y España? Embajadora Linglingay Lacanlale: Las relaciones entre Filipinas y España son muy amistosas. España continúa siendo un importante asociado para Filipinas, principalmente en cuestiones culturales. También sigue siendo un destino muy elegido por trabajadores emigrantes filipinos pues comprenden rápidamente el lenguaje y eso facilita su adaptación. Nuestro idioma nacional, el tagalo, tiene muchas palabras inspiradas en el castellano. Es muy difícil para un trabajador migrante llegar a un lugar y no entender el idioma del lugar, y eso hace de España un lugar muy considerado por los filipinos para instalarse. En mi opinión, la afinidad en el lenguaje facilita la conexión y la integración.
Pregunta: finalmente, Embajadora, deseamos saber en qué destinos ejerció sus funciones previamente a ser enviada a Buenos Aires Embajadora Linglingay Lacanlale: antes de estar destinada aquí, trabajé en la sede central del Ministerio de Asuntos Exteriores de Filipinas, anteriormente estuve en Bangkok, Tailandia, como Embajadora y más atrás en el tiempo estuve como embajadora en Austria, concurrente con Croacia, Eslovenia y Eslovaquia; y previamente fui Representante Permanente Adjuntos de Filipinas en Nueva York, con algunas responsabilidades en Naciones Unidas.
Por Martín Alejandro Pizzi
Relaciones Internacionales Universidad Católica de Salta
1) https://asean.org/?static_post=rcep-regional-comprehensive-economic-partnership