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La voz de la diplomacia, la posición oficial de Kiev sobre temas candentes de la actualidad de Ucrania. En la nueva sede diplomática del barrio de Belgrano en Buenos Aires, entrevista al Embajador de Ucrania en Argentina, S E Yurii Duidin. Un nuevo contacto de prensa para actualizar sobre temas domésticos y de la política exterior de Ucrania. A fondo sobre el tema de Crimea, la relación con la Federación Rusa y los problemas del Este del país. También la situación política del gobierno del Presidente Petró Poroshenko y las dificultades de implementación de las reformas en un contexto económico-social en crisis. Entrevista de Vanina Soledad Fattori donde el diplomático ucraniano explicó la evolución del protocolo de «Minks 2» y brindó detalles de la relación con el nuevo gobierno de Mauricio Macri y los contactos con la Cancillería Argentina.

Pregunta: Para ponernos en contexto de la situación de Ucrania hoy,  una  primera imagen que se nos viene a la mente es la de la revolución del Euro-Maidan. ¿Desde aquel 2013 hasta el día el hoy, se puede decir que concluyó? ¿Qué balances se pueden hacer cuando buscamos conocer resultados de lo que la gente aspiraba en ese momento al panorama del presente?
Yurii Diudin: Lamentablemente esa revolución, en cierta medida, continúa en el sentido de que todavía no conseguimos los objetivos que fueron planteados por los participantes de esa revolución. Aún no los conseguimos debido a la agresión externa rusa que estamos sufriendo, ello dificulta mucho poder llevar adelante las reformas planteadas por el gobierno ucraniano para que facilite el acercamiento a la Unión Europea. Hablamos de reformas profundas, que van desde el área de la creación de la nueva policía hasta oficinas para la lucha anti-corrupción. Cuando podamos finalizar con el proceso de reformas, entonces, podremos dar comienzo al fin de la revolución.

Pregunta: ¿Este proceso de reformas es el coincidente con el paquete que pide los países de Europa? ¿Son las políticas que se diseñan en Bruselas?
Yurii Diudin: Por supuesto, nuestro objetivo es acercarnos lo más posible a los estándares de la Unión Europea, para poder ser parte de ella en un futuro. Aunque, es importarte aclarar que hoy nuestro objetivo no es conseguir el ingreso, sino elevar nuestros estándares de vidas hacia el de los europeos. Cuando podamos lograr esto, ahí realizaremos un referéndum para que el pueblo decida si Ucrania ingresa o no. Será en un tiempo aproximado de acá a 5 años, de modo que, deberíamos evaluar cómo sería la situación para ese entonces, considerando lo que sucede hoy en el continente. En definitiva, la integración que estamos desarrollando con la Unión Europea es de asociación política, como  así también la cooperación económica, mediante una zona de libre comercio que ya está plenamente en vigor a partir del inicio de este año.

Pregunta: Diferentes think tank, como Carnegie Europe, exponen que Ucrania tiene un problema central y que este está en su política doméstica, referenciado la tensa relación entre el presidente Petró Poroshenko y el Primer Ministro Arseni Yatseniuk. ¿Qué puede decirnos al respecto?
Yurii Diudin: A modo de comprender mejor el panorama es importante tener presente que nuestro Presidente es el Jefe del Estado, quien es elegido mediante voto directo. El Jefe de Gobierno es el Primer Ministro, quien es nombrado por el Presidente pero según la iniciativa de la coalición gubernamental. Esta coalición en el Parlamento es de 5 partidos: el del Presidente, el del Primer Ministro y tres minoritarios. Asimismo, esa coalición también es la que propuso en su entonces la candidatura de Yatseniuk. Lo que ocurre hoy, es que hay una cierta insatisfacción del pueblo por el lento proceso de las reformas, ya que al ciudadano le gustaría que sea más rápido. Pero para ello, se requiere mucho tiempo, no en vano hemos creado la Oficina Anticorrupción, que es un asunto muy álgido. Esta demanda llevó a que la coalición exprese reticencias frente al Primer Ministro. Sin embargo, no hablamos de crisis políticas, sino de un proceso político interno en la coalición.
En el futuro próximo, uno de los escenarios posibles que podría suceder sería que si la coalición es reformada con la incorporación de un nuevo partido, entonces, ahí se podría producir la candidatura de otro Primer Ministro con un perfil más tecnócrata; pero esto, para nada, amenaza la estabilidad política ucraniana.

Pregunta: Siguiendo en el escenario interno, ¿cómo la describiría usted la situación económica social?
Yurii Diudin: La situación económica social es bastante difícil. En primer lugar es provocada por la agresión extrema que estamos sufriendo. El año pasado tuvimos la inflación de acerca del 40% y una caída del PBI del 10%. Este año estamos pronosticando cerca de 0,5 a 2% de crecimiento de PBI y una inflación del 12%. Estos valores se deben a que estamos gastando muchos recursos para proteger nuestro país. Hablamos de recursos que podríamos haber utilizado en otras áreas que se ven afectadas por las reformas, como la económica, judicial, la fiscal (con el sistema tributario), pero lamentablemente los tenemos que gastar mucho en una guerra que es innecesaria para el pueblo ucraniano. Esto provoca que debamos pagar millones y millones por día para mantener una línea de defensa y la seguridad del país.

Pregunta: Hemos visto en los últimos días que se realizaron manifestaciones en la embajada de rusa ubicada en Kiev. ¿Qué interpretación hacemos de ello?
Yurii Diudin: Se realizaron en apoyo a la piloto ucraniana, Nadia Savchenko, que está presa injustamente en Rusia, acusada de haber participado en la matanza de civiles rusos, de haber coordinado el fuego, por ello hay una campaña internacional llevada adelante por todos lo ucranianos del mundo para liberarla. Los fiscales la condenaron a 23 años de prisión, pese a numerosas pruebas de su inocencia presentadas por su defensa, la próxima semana se conocerá el fallo final. Mientras, ella está en huelga de hambre y sin hidratarse. Bajo todos los escenarios posibles su vida corre peligro. Ella tiene inmunidad parlamentaria europea por ser miembro del Parlamento de Ucrania y también de la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa, pero Rusia evade esos derechos. Hasta que no esté liberada, tampoco podemos creer en promesas de autoridades rusas.

Pregunta: Teniendo en cuenta este suceso y proyectando un presunto acuerdo de paz que ponga fin al conflicto ¿cómo sería la reconciliación social? ¿Cómo podrán vivir los ucranianos y los ciudadanos del este que se manifiestan pro-rusos?
Yurii Diudin: Las manifestaciones mencionadas son parte de otra cosa, como bien dije, son parte de una reclama de justicia. Por su parte, el “día después”, el cómo será, esa reconciliación es un problema grave a resolver. Por ahora es muy difícil predecirlo o planificarlo, lo cierto que llevará muchos a años porque los ánimos son muy fuertes.

Pregunta: Nos preocupa saber la situación interna, pero también la externa. Estamos transitando un proceso de paz mediante el formato de Minsk. ¿Qué reflexión o balances podemos hacer?
Yurii Diudin: El mes pasado se cumplió un año desde que se firmaron los acuerdos de Minsk. Ahora se transitaríamos por “Minsk 2” y tal como venía siendo anteriormente, se trata de una hoja de ruta de 13 puntos sobre cómo debería ser el proceso de paz. Entre esos puntos se encuentra, el alto al fuego, la retirada de armamentos pesados, canje de prisioneros. Éstos están siendo cumplidos parcialmente. Sin embargo, siempre hay violaciones al alto fuego por parte de los rusos y los “rebeldes” apoyados por ellos.

Pregunta: ¿Pero las acusaciones son mutuas?  Ambas partes exponen pruebas…
Yurii Diudin: Exactamente, pero los observadores de OSCE registran de dónde vienen esas violaciones. Por nuestra parte, buscamos cumplir con todos los puntos, por ejemplo, retiramos todos los armamentos pesados a un sitio seguro.

Pregunta: ¿Ese sería el gran avance del proceso? ¿El retiro de armamento?
Yurii Diudin: Si, pero lo que ocurre con este avance es que no está siendo respetado al 100%. Los observadores de OSCE son personal civil que no cuenta con portación de armas, por lo que, muchas áreas están fuera de su control y sólo trabajan de día. Entonces, los rebeldes retiran los armamentos de días (tal como dice Minsk), pero luego llegada la noche los vuelven a colocar en el punto de contacto. Satélites muestran esta situación. Lo mismo ocurre con el canje de prisioneros, al principio eran “todos por todos”, pero se canjean “5 por 10”, “5 por 20”, no es equilibrado; todavía tenemos centenas de nuestras personas que están en cautiverio del otro lado. De esta forma, si vamos punto por punto veremos que no se cumplen en su plenitud. Al respecto, el último punto es la recuperación del control sobre la frontera con Rusia.

Pregunta: ¿Aquí comenzaría la parte más política de la hoja de ruta de Minsk?
Yurii Diudin: Claro. Siguiendo la línea, para nosotros ése no debería ser el último punto. Francamente, debería ser el primero, porque mientras sigamos sin tener control de la frontera, seguirán llegando armas, mercenarios, por ello apelamos a Naciones Unidas para desplegar una operación de paz, pero juega en nuestra contra el poder de veto de Rusia. También estamos apelando a la Unión Europea para emprender una operación policial europea, sin embargo, esto aún está en discusión. Si seguimos con los puntos políticos, también están las elecciones en el este de Ucrania; para que ello suceda lo que primero que tiene haber es una condición apta de seguridad, con presencia de observadores internacionales y presencia de partidos políticos de Ucrania. No estamos en contra de las elecciones, de lo contrario, queremos autoridades legítimas y autonomía, tal como lo hemos planteado. Pero para que estas elecciones sean reconocidas por la comunidad internacional primero hay que garantizar las condiciones de seguridad y participación de todas las fuerzas políticas.

Pregunta: El presidente Poroshenko había creado una propuesta para el diálogo político, un plan estratégico. ¿Hoy ese diálogo entre los líderes del Este y gobierno es nulo?
Yurii Diudin: Tenemos el grupo de contacto trilateral, con representantes de Rusia, de Ucrania del este y de los observadores; ellos se reúnen periódicamente, de modo que hay contacto, pero se dificulta porque avanza lentamente. Además, existe el formato de Normandía con Francia, Alemania, Rusia y Ucrania, donde se reúnen tanto sus respectivos Presidentes o Cancilleres, tal como fue hace dos semanas para debatir sobre cómo se está supervisando el conflicto.

Pregunta: ¿Qué herramientas tiene la diplomacia ucraniana para contar al mundo cuál es su posición? ¿Cómo hace llegar su voz oficial de reclamo?
Yurii Diudin: Aunque se lo niegue, tratamos de mostrar la presencia rusa en Ucrania, hay unos 9 mil rusos combatiendo, así lo demuestran imágenes satelitales como las comunicaciones interceptadas. Con los sistemas de inteligencia de la Unión Europea y Estados Unidos no hace falta demostrarles nada a ellos, ya lo saben, pero si debemos mostrárselo a los otros países para explicarle que no es una guerra interna ucraniana entre “ucranianos buenos y ucranianos malos guerreando entre sí”, tal como lo quiere mostrar Rusia. De lo contrario, es un conflicto por injerencia externa, es una invasión del vecino ruso, porque si no fuera por su apoyo de seguro este conflicto no seguiría o no existiría. Estamos seguros de que los rusos tienen control sobre los rebeldes, si ellos le mandan la orden de parar el fuego, lo harán.

Pregunta: ¿Y con respecto a Crimea? ¿Qué camino está siguiendo Ucrania?
Yurii Diudin: Me gustaría dejar en claro que el estatus que nosotros le otorgamos es como “territorio ucraniano temporalmente ocupado”. No estamos con los brazos cruzados, estamos elaborando una serie de pleitos judiciales para llevarlos a instancias internacionales, como la Corte Internacional de Justicia. La base de este trabajo es la resolución de la Asamblea General de ONU que referencia la integridad territorial de Ucrania, votado por 100 países. No queremos repetir el mismo error de Georgia que en el 2008, luego de la invasión rusa se apresuró en ir a la Haya y perdió un intento valioso. Por supuesto, no haremos ninguna ingerencia militar, eso está fuera de discusión, Crimea ya está militarizada por Rusia, de modo que no vamos a recuperarla mediante el empleo de la fuerza militar, no queremos una guerra tremenda. Asimismo, Crimea está mal económicamente, su turismo ha decrecido más del 40%, además está llena de sanciones sin posibilidad de ingreso de aviones ni de embarcaciones y si lo hacen, esas empresas sufren sanciones. Por otro lado, muchas de las casas sólo tiene 3 horas de luz por día, y los ciudadanos cuentan con escasez de productos porque Rusia no puede abastecerlos.

Pregunta: Finalmente, Argentina ha dado un giro en su política exterior tras asumir un nuevo Presidente, ¿Usted ha tenido contacto con las actuales autoridades argentinas?
Yurii Diudin: Si claro. En los dos años anteriores de mi gestión aquí, yo no pude reunirme ni una vez con el canciller Timerman. Ahora, comenzamos un año nuevo y ya tuve la posibilidad de poder reunirme con la canciller Susana Malcorra; como también, con el Secretario de Asuntos Estratégicos de Jefatura de Gabinete, Fulvio Pompeo; el vicecanciller, Carlos Froadori. El diálogo ahora es frecuente. La cancillería, quien me dice que la coyuntura argentina ha cambiado para abrirse al mundo, me ofrecido toda la disponibilidad para potenciar la cooperación con Ucrania. Antes teníamos proyectos bloqueados, ahora vamos a trabajar por ellos y tendremos apoyo de la diplomacia argentina.

Por Vanina Soledad Fattori
Relaciones Internacionales USAL – Posgrado Periodismo PERFIL-USAL


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