Comparte este contenido

Representa el 90% de la economía mundial, el 80% del comercio mundial y las 2/3 de la población mundial, el foro G-20 tendrá la presidencia de Turquía para el 2015. En un contexto global de falta de liderazgos, de desaceleración de economía y estancamiento a escala global, las oportunidades y desafíos para Turquía con la visibilidad que deberá tomar Ankara con la titularidad del G-20 el año próximo. Compartimos artículo del «Daily Sabah», que nos acerca referencias de la economía turca, que ha superado un proceso electoral, alcanzando estabilidad y consolidación política, muchos indicadores posicionan al país con gran potencial y fuerza para emprender el liderazgo del G-20.

Bajo un caudal de paquetes estimulantes y «falsos amaneceres» que se dan en los mercados emergentes como en países en desarrollo, producto del estimulo forzado por una abundante liquidez que busca «bombear las economías» después de la crisis financiera mundial, el mundo económico-financiero está sucumbido en un período de tendencias en baja y hacia crecimientos mediocres, que se convierten en insostenibles en el corto plazo. Pese a la recuperación económica de los Estados Unidos sostenida por un mejoramiento en el desarrollo de un número de diferentes variables, que no son sólo los recursos de oil and gas, el mundo subdesarrollado está comenzando a perder la plataforma de las condiciones de demanda mundial del día a día. China está muy lejos de esos gloriosos días de doble dígito en su crecimiento, India está luchando con la baja de consumo, Rusia está sufriendo la baja del precio del petróleo y Brasil está sintiendo las implicaciones políticas de su impasse económico.Istambul
Estos países que forman los BRICs están sufriendo la misma sensación de desaceleración  que otras economías en desarrollo de Europa del Este, Latinoamérica y el este de Asia. Sumado a que las relaciones en Europa no funcionan del todo bien y donde los programas de estímulo financiero que sirvieron correctamente en los Estados Unidos y Reino Unido, fallaron en obtener dinámica al nivel que se encontraba antes de la crisis. Los conflictos de interés entre los  países líderes  de la Unión Europea y aquellos del sur de Europa se están haciendo más pronunciados, y lo asombroso que países como Alemania están sufriendo una desaceleración. La erosión de las opciones de financiación internacional son una gran preocupación para todo el mundo, ya que los inversores están volviendo a lo seguro por las altas tasas de la Reserva Federal. Además de las condiciones financieras actuales,  no sólo hay un preocupante descenso económico sino un riesgo geopolítico en países como Siria, Irak, Ucrania y Libia, que suman inestabilidad de la mano de la caída del precio del petróleo y la baja de la demanda global.

Ante este escenario de tanta incertidumbre, se encuentra Turquía, que muestra una moderada pero positiva divergencia similar a los países en desarrollo. Estos datos ayudan a ver el estado en que se encuentra Turquía:

– El déficit de cuenta corriente se redujo de $65 a $47 m.
– Teniendo en cuenta la baja del precio del petróleo,  se estabilizo el PBI en un 5, 5 %.
– Tasa de crecimiento económico es del 3,3 %, aunque no es un número positivo teniendo en cuenta el contexto internacional es una cifra satisfactoria.

El hecho de que Turquía logro bajar su déficit en cuenta corriente en un contexto de crecimiento moderado de la economía, indica que no habrá una recesión o crisis cuando la Reserva Federal empiece a aumentar las tasas de interés. El otro ítem importante es la inflación, que oscila entre 9,4% con el impacto en el precio de los alimentos, pero después de una reforma estructural se espera  que se estabilice alrededor del 7,5 al 8, con lo cual es un beneficio para el consumo y contribuye a la previsibilidad económica del país.  En el Programa Económico de Mediano Plazo, la mayor prioridad es avanzar en las reformas estructurales para controlar la inflación y aumentar el valor agregado en los sectores productivos del país.Made IN T
El periodo de bajo crecimiento económico puede ser un tiempo para llevar a cabo reformas estructurales como el mejoramiento de la infraestructura industrial y tecnológica. Similares a los esfuerzos que China está haciendo durante el periodo de crisis, las inversiones públicas pueden ser dirigidas a la creación de infraestructura necesaria para la investigación, la expansión del desarrollo como el incentivo en la producción de bienes intermedios para reducir la dependencia a las importaciones. Los sectores claves como el petroquímico, el acero de alta calidad, productos electrónicos de alto consumo y equipamiento médico, beneficiarán en un alto porcentaje la producción media a alta junto a un gran valor añadido.
En este contexto, la presidencia de Turquía en la G20 presenta una oportunidad brillante para tratar cuestiones cruciales en la agenda de la gobernanza mundial y estimular el dinamismo de una economía nacional formando nuevos lazos comerciales como diplomáticos. Un esfuerzo colectivo con actores  políticos, élites empresariales, emprendedores e intelectuales, será necesario para hacer una capitalización inteligente de beneficios que representa esta oportunidad que le acontece a Turquía en los meses venideros.

Publicado en el periódico turco «Daily Sabah»
http://www.dailysabah.com/columns/sadik_unay/2014/10/25/turkeys-middle-power-diplomacy-in-the-g20

Adaptación: Agustina Leivas – Escuela de Estudios Orientales de la Universidad del Salvador.

Turquía en el G-20: http://www.mfa.gov.tr/g-20-en.en.mfa

Translate »